Existen diversas estrategias de aprendizaje basado en la comunidad, como:
El servicio comunitario basado en lo académico, que se caracteriza por el trabajo conjunto entre las instituciones educativas (p.e. infantil, básica, media, superior) en el que se establecen relaciones recíprocas de cooperación, para revitalizar, mejorar o transformar a la comunidad local.
La educación para la ciudadanía, que se orienta a la preparación de ciudadanos responsables y comprometidos mediante la implementación de experiencias de aprendizaje participativo, centradas en conceptos democráticos esenciales.
El aprendizaje basado en el lugar, que contextualiza las situaciones de aprendizaje a partir de las características de la comunidad territorial. Por ejemplo, su historia, su cultura y su economía, para atender a sus intereses y desafíos, con los miembros de la comunidad, que a su vez se convierten en recursos y beneficiarios.
El aprendizaje basado en el trabajo, que conecta las experiencias de aprendizaje con el sector productivo, con el objeto de promover la continuidad de estudios técnico-profesionales, mediante el conocimiento práctico de los oficios y/o especialidades.
El aprendizaje servicio, que es una metodología innovadora que permite el desarrollo de una experiencia-acción (servicio) en la comunidad. Su ejercicio se integra al currículum, en el cual los enseñantes aplican, verifican y profundizan sus aprendizajes, a la vez que aportan a la solución de un desafío comunitario, que permite descubrir los conceptos disciplinarios, en su vínculo con situaciones reales y la resolución de problemas concretos.